Para quemar calorías, adquirir fuerza y tonicidad, además de estilizar tu figura, sólo necesitas una barra vertical y atreverte a sacar tu l...
Para quemar calorías, adquirir fuerza y tonicidad, además de estilizar tu figura, sólo necesitas una barra vertical y atreverte a sacar tu lado sensual.
El pole fitness, pole dance o cardiostrip, es una actividad que cada día incrementa su número de seguidoras.
Amas de casa, estudiantes, profesionistas; quienes la practican buscan moldear el cuerpo y al mismo tiempo fomentar su autoestima con esta actividad tan saludable como divertida.
Esta combina movimientos de pilates, danza, yoga y streching con la opción adicional de ejercitar músculos que no es posible fortalecer en el gimnasio
Famosas como Kate Hudson, Carmen Electra, Kate Moss, Jennifer Aniston, Paris Hilton, Pamela Anderson, Jessica Alba y Cindy Crawford, entre muchas más lo practican.
Un poco de historia
El pole dance tiene sus orígenes en el uso de mallkhamb (tubo gimnástico) y en el mallastambha (pilar gimnástico), instrumentos que se emplean desde hace más de 250 años en la práctica del yoga.
La cuerda o el palo de madera ayudaban a aumentar la fuerza y el volumen muscular de las personas.
En los 20, durante la Gran Depresión en Estados Unidos, ferias ambulantes viajaban por el país para entretener a la población y que olvidaran por un momento la crisis económica por la que atravesaba el país.
Las carpas ofrecían todo tipo de espectáculos, entre ellos, el de las bailarinas eróticas, quienes sólo podían utilizar un pequeño escenario para bailar de forma sugerente. El reducido espacio obligaba a las chicas a acercarse al tubo que sostenía la carpa y bailar “con él”.
Al paso del tiempo, el show -con todo y tubo- se trasladó a los bares como espectáculo burlesque.
Fue en los 80 cuando el pole dance resurgió en los bares de striptease en Estados Unidos. Sin embargo, es hasta en los 90, gracias a la canadiense Fawnia Mondey, cuando se vuelve una opción más dentro del mundo del fitness.
Fawnia declaró en televisión “El pole dancing es una manera muy divertida y sexy de tonificarte. En una clase para principiantes es posible aprender más de 21 movimientos entre los que se incluyen algunos muy candentes de la parte inferior del cuerpo para trabajar en el piso. En el trabajo vertical sobre el tubo, se maneja más el peso mismo como instrumento, pues muchas veces hay que ‘cargarlo’ y eso fortalece los músculos.
“Hay quienes lo usan solamente como ejercicio y muchas más que lo practican para volver a sentirse sexys y añadir algo especial a su relación de pareja”.
Hoy el éxito de este tipo de ejercicio se ha expandido a países como Canadá, Australia, Nueva Zelanda, Estados Unidos, Reino Unido, Sudáfrica, España, Bélgica y Francia.
Fuerza y erotismo
La clave está en que a través de un estilo de baile sumamente erótico se puede adquirir fuerza, flexibilidad y tono muscular. Pero ¿y cómo? uno de los principios básicos es sostener el propio peso mientras se realiza una coreografía alrededor y sobre el tubo.
El resultado: abdominales, glúteos, piernas y brazos firmes y torneados, además de que se queman entre 300 y 500 calorías en una hora de clase.
Otro de los beneficios que ofrece es que ayuda a que las mujeres olviden sus complejos, eleven su autoestima y tomen el control de su cuerpo.
Para practicarlo se pueden utilizar dos tipos de indumentaria: ropa deportiva y ajustada, pero cómoda o prendas más sexys como pequeñísimos shorts, tops y hasta zapatos de tacón.
Los lugares que imparten este tipo de clases lo hacen por niveles, desde aquellas que no saben moverse, hasta para quienes tienen alguna experiencia en el baile sensual, pero quieren aprender posturas audaces como la Gran V (detenida con los brazos sobre el tubo, abrir las piernas con la cabeza hacia el piso), el Giro del sol (sostenida por las piernas girar alrededor del tubo con el cuerpo paralelo al piso) y Lady sentada (tomar impulso y con las piernas en escuadra, girar alrededor de la barra), a ritmo de funk, música electrónica o dance.
Una suscripción puede ser una buena opción de regalo para tu pareja en un aniversario, cumpleaños y hasta te puede funcionar para reconquistarlo, pues ¿quién se puede resistir a un baile privado y muy sensual?
El pole fitness, pole dance o cardiostrip, es una actividad que cada día incrementa su número de seguidoras.
Amas de casa, estudiantes, profesionistas; quienes la practican buscan moldear el cuerpo y al mismo tiempo fomentar su autoestima con esta actividad tan saludable como divertida.
Esta combina movimientos de pilates, danza, yoga y streching con la opción adicional de ejercitar músculos que no es posible fortalecer en el gimnasio
Famosas como Kate Hudson, Carmen Electra, Kate Moss, Jennifer Aniston, Paris Hilton, Pamela Anderson, Jessica Alba y Cindy Crawford, entre muchas más lo practican.
Un poco de historia
El pole dance tiene sus orígenes en el uso de mallkhamb (tubo gimnástico) y en el mallastambha (pilar gimnástico), instrumentos que se emplean desde hace más de 250 años en la práctica del yoga.
La cuerda o el palo de madera ayudaban a aumentar la fuerza y el volumen muscular de las personas.
En los 20, durante la Gran Depresión en Estados Unidos, ferias ambulantes viajaban por el país para entretener a la población y que olvidaran por un momento la crisis económica por la que atravesaba el país.
Las carpas ofrecían todo tipo de espectáculos, entre ellos, el de las bailarinas eróticas, quienes sólo podían utilizar un pequeño escenario para bailar de forma sugerente. El reducido espacio obligaba a las chicas a acercarse al tubo que sostenía la carpa y bailar “con él”.
Al paso del tiempo, el show -con todo y tubo- se trasladó a los bares como espectáculo burlesque.
Fue en los 80 cuando el pole dance resurgió en los bares de striptease en Estados Unidos. Sin embargo, es hasta en los 90, gracias a la canadiense Fawnia Mondey, cuando se vuelve una opción más dentro del mundo del fitness.
Fawnia declaró en televisión “El pole dancing es una manera muy divertida y sexy de tonificarte. En una clase para principiantes es posible aprender más de 21 movimientos entre los que se incluyen algunos muy candentes de la parte inferior del cuerpo para trabajar en el piso. En el trabajo vertical sobre el tubo, se maneja más el peso mismo como instrumento, pues muchas veces hay que ‘cargarlo’ y eso fortalece los músculos.
“Hay quienes lo usan solamente como ejercicio y muchas más que lo practican para volver a sentirse sexys y añadir algo especial a su relación de pareja”.
Hoy el éxito de este tipo de ejercicio se ha expandido a países como Canadá, Australia, Nueva Zelanda, Estados Unidos, Reino Unido, Sudáfrica, España, Bélgica y Francia.
Fuerza y erotismo
La clave está en que a través de un estilo de baile sumamente erótico se puede adquirir fuerza, flexibilidad y tono muscular. Pero ¿y cómo? uno de los principios básicos es sostener el propio peso mientras se realiza una coreografía alrededor y sobre el tubo.
El resultado: abdominales, glúteos, piernas y brazos firmes y torneados, además de que se queman entre 300 y 500 calorías en una hora de clase.
Otro de los beneficios que ofrece es que ayuda a que las mujeres olviden sus complejos, eleven su autoestima y tomen el control de su cuerpo.
Para practicarlo se pueden utilizar dos tipos de indumentaria: ropa deportiva y ajustada, pero cómoda o prendas más sexys como pequeñísimos shorts, tops y hasta zapatos de tacón.
Los lugares que imparten este tipo de clases lo hacen por niveles, desde aquellas que no saben moverse, hasta para quienes tienen alguna experiencia en el baile sensual, pero quieren aprender posturas audaces como la Gran V (detenida con los brazos sobre el tubo, abrir las piernas con la cabeza hacia el piso), el Giro del sol (sostenida por las piernas girar alrededor del tubo con el cuerpo paralelo al piso) y Lady sentada (tomar impulso y con las piernas en escuadra, girar alrededor de la barra), a ritmo de funk, música electrónica o dance.
Una suscripción puede ser una buena opción de regalo para tu pareja en un aniversario, cumpleaños y hasta te puede funcionar para reconquistarlo, pues ¿quién se puede resistir a un baile privado y muy sensual?
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