El grupo Sorroche frena sus proyectos inmobiliarios y abre en Manresa (Barcelona, EspaƱa) un gimnasio de 5.500 m 2 La crisis econĆ³mica ha o...
El grupo Sorroche frena sus proyectos inmobiliarios y abre en Manresa (Barcelona, EspaƱa) un gimnasio de 5.500 m 2
La crisis econĆ³mica ha obligado al Grupo Sorroche, una empresa familiar manresana con mĆ”s de 50 aƱos en el sector del ladrillo, a hacer un parĆ©ntesis en sus negocios inmobiliarios y diversificar sus retos empresariales. "La construcciĆ³n pasa por un momento difĆcil, hay poca oferta y mucha competencia. Los ayuntamientos se demoran en los pagos, y tenemos muchas partidas congeladas. Por eso nos hemos visto obligados a reducir la plantilla, pero con la mentalidad de aspirar a nuevos proyectos en pocos meses, cuando salga otro plan E",comenta Antoni Sorroche, uno de los cuatro hermanos accionistas del grupo.
La empresa vio venir el frenazo que sufrirĆa el sector de la construcciĆ³n. En el 2006 cerrĆ³ todas sus promociones y renunciĆ³ a levantar medio centenar de viviendas privadas para las que ya tenĆa licencia. Y se abriĆ³ a nuevos mercados, intensificando su apuesta por la compraventa de naves industriales y la obra pĆŗblica.
Hace un mes, abriĆ³ el Club Fitness Cube, el proyecto estrella del centro lĆŗdico Terra Nostra, en el polĆgono Trullols de Manresa. A pie del Eix del Llobregat, allĆ ha invertido cuatro millones de euros y da empleo a cuarenta profesionales. AdemĆ”s, todo ha quedado en casa: los trabajadores de la constructora han participado mĆ”s de medio aƱo en la edificaciĆ³n del complejo.
La crisis econĆ³mica ha obligado al Grupo Sorroche, una empresa familiar manresana con mĆ”s de 50 aƱos en el sector del ladrillo, a hacer un parĆ©ntesis en sus negocios inmobiliarios y diversificar sus retos empresariales. "La construcciĆ³n pasa por un momento difĆcil, hay poca oferta y mucha competencia. Los ayuntamientos se demoran en los pagos, y tenemos muchas partidas congeladas. Por eso nos hemos visto obligados a reducir la plantilla, pero con la mentalidad de aspirar a nuevos proyectos en pocos meses, cuando salga otro plan E",comenta Antoni Sorroche, uno de los cuatro hermanos accionistas del grupo.
La empresa vio venir el frenazo que sufrirĆa el sector de la construcciĆ³n. En el 2006 cerrĆ³ todas sus promociones y renunciĆ³ a levantar medio centenar de viviendas privadas para las que ya tenĆa licencia. Y se abriĆ³ a nuevos mercados, intensificando su apuesta por la compraventa de naves industriales y la obra pĆŗblica.
Hace un mes, abriĆ³ el Club Fitness Cube, el proyecto estrella del centro lĆŗdico Terra Nostra, en el polĆgono Trullols de Manresa. A pie del Eix del Llobregat, allĆ ha invertido cuatro millones de euros y da empleo a cuarenta profesionales. AdemĆ”s, todo ha quedado en casa: los trabajadores de la constructora han participado mĆ”s de medio aƱo en la edificaciĆ³n del complejo.
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