La creciente evidencia está informando que el cáncer es una enfermedad metabólica caracterizada por una insuficiencia respiratoria mitocondr...
La creciente evidencia está informando que el cáncer es una enfermedad metabólica caracterizada por una insuficiencia respiratoria mitocondrial celular. Las células cancerosas no pueden sobrevivir y prosperar a menos que obtengan glucosa y aminoácidos para fermentar. Una limpieza cetogénica se ha propuesto como un medio de destruir las células del cáncer. La fuente de energía ideal para la limpieza cetogénica es el aceite de coco extra virgen con sus poderosas propiedades de estimulación inmunológica.
El famoso biólogo celular Otto Warburg descubrió que las células cancerosas tienen un metabolismo alterado y son incapaces de producir energía a través de la respiración celular normal. El efecto Warburg es la observación de que estas células producen la totalidad de su energía a partir de un proceso que es dependiente del azúcar llamado glucólisis y produce altos niveles de ácido láctico como resultado.
Daño mitocondrial y la inestabilidad genómica
Las mitocondrias pueden dañarse por la exposición a toxinas ambientales, diversos virus y procesos inflamatorios crónicos en el cuerpo. Cuando esto sucede, las mitocondrias pierden su capacidad de producir energía a través de la respiración celular. La insuficiencia respiratoria conduce a la alteración de la función metabólica y la dependencia de la glucosa y la fermentación de aminoácidos para producir energía. Este proceso también conduce a la inestabilidad genómica y la formación de ADN mutante.
Las células normales tienen tasas relativamente bajas de glucólisis y obtienen la mayor parte de su energía a través del metabolismo aeróbico de piruvato en la mitocondria. Los estudios han demostrado que las células cancerosas han perdido su capacidad de producir energía a través del metabolismo aeróbico, incluso cuando el oxígeno es abundante. Estas células dependen de procesos glicolíticos para todas sus exigencias de energía. Cánceres metastásicos con crecimiento acelerado se considera que tienen tasas glicolíticas hasta doscientas veces mayor que los tejidos normales.
Las células cancerosas necesitan azúcar
El dr. Thomas Seyfried ha expandido en las teorías de Warburg para mostrar que las células cancerosas pueden producir energía a través de la fermentación de glucosa y aminoácidos. Con el fin de obtener suficiente azúcar para mantener sus sistemas metabólicos las células de cáncer regulan los receptores de insulina y contienen diez veces más que las células normales. Esto les permite utilizar la glucosa y otros nutrientes de la sangre a un ritmo acelerado.
El metabolismo de ácidos grasos resulta en cetonas que las células normales pueden utilizar, pero las células cancerosas no pueden. Estos cuerpos cetónicos proporcionan una gran fuente de energía anti-inflamatoria para el cuerpo que también priva a las células cancerosas de sus demandas de nutrientes.
Las cetonas alimentan a las células normales y dejan que las células cancerosas mueran de hambre
La investigación del Dr. Seyfried ha demostrado que los niveles de azúcar en sangre óptimos para destruir el cáncer se encuentran entre 55 a 65 mg / dl y niveles de cetonas deben estar entre 3 mm y permanecer bajo 7 mm. Esto se hace a través de un proceso de ayuno y consumir fuentes de grasas saludables sin carbohidratos durante un período de tres y un máximo de diez días. El cáncer metastásico debe llegar hasta los 10 días en la limpieza, si es posible.
El aceite de coco contiene una amplia gama de grasas saturadas de cadena pequeñas y medianas que el cuerpo metaboliza muy fácilmente para la producción de energía. El aceite de coco es rico en ácido láurico el cual estimula el sistema inmunológico, que se convierte en nuestro cuerpo a monolaurina.
Monolaurina contiene propiedades extraordinariamente potentes anti-bióticas, anti-virales y anti-hongos. A diferencia de antibióticos y antivirales artificiales estos ácidos grasos no representan ningún peligro dentro de nuestros cuerpos. Esto es especialmente útil ya que las personas con cáncer tienen sistemas gastrointestinales con disbiosis que contribuyen a la inflamación crónica que puede haber causado la inestabilidad genómica en primer lugar.
Limpieza de aceite de coco
- Tome 2 cucharadas de aceite de coco cada 3 horas durante el día (8-10 cucharadas al día)
- Beber un galón de agua limpia con extractos antioxidantes (limón, cúrcuma, clorofila, vinagre de manzana, extractos de hierbas fermentadas, etc)
- Use laxantes y probióticos a base de hierbas naturales para asegurar la eliminación apropiada del intestino.
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