Esas cepas virulentas, excepcionalmente resistentes a fármacos anti-bacterianos conocidos como “super-bacterias” que amenazan cada vez más ...
Esas cepas virulentas, excepcionalmente resistentes a fármacos anti-bacterianos conocidos como “super-bacterias” que amenazan cada vez más a pacientes de hospitales en todo el mundo se han vuelto mucho más amenazantes. Un nuevo estudio publicado en la revista Construcción y Medio Ambiente revela que son capaces de propagarse no sólo a través del contacto directo, sino también a través del aire, lo que significa que personas pueden infectarse simplemente al respirar aire contaminado.
Para llegar a esta conclusión sorprendente, un equipo de investigadores de la Universidad de Leeds en el Reino Unido creó un maniquí caliente para parecerse a un cuerpo humano, y se inyectó al maniquí con Staphylococcus aureus, estrechamente relacionado con la variedad resistente a la meticilina. Luego, activaron el maniquí para comenzar a exhalar las bacterias como lo haría un humano y se midió la propagación de las bacterias en varios puntos alrededor de un cuarto de hospital.
Tras el análisis, el equipo encontró que los niveles más altos de contaminación con S. aureus se encontraban en el área que rodea el maniquí, como era de esperarse. Pero los diversos niveles también se encontraron cerca de 4 metros de distancia del maniquí, lo que sugiere que las bacterias mortales pueden ser capaces de propagarse grandes distancias por el aire y contagiar a otras personas, sobre todo el personal del hospital y otros pacientes.
“El nivel de contaminación inmediatamente alrededor de la cama del paciente es alto, pero eso es de esperarse. Los hospitales mantienen camas limpias y desinfectan las mesas y superficies próximas a las camas”, dijo la Dra. Cath Noakes, autora principal del estudio. “Sin embargo, también capturamos cantidades significativas de bacterias justo al otro lado de la habitación, de hasta 3.5 metros de distancia y sobre todo a lo largo de la ruta de flujo de aire en la habitación. Ahora tenemos que averiguar si esta dispersión en el aire es una importante vía de propagación.“
El siguiente paso para el equipo de Leeds es usar modelos de computadora para trazar la posible propagación de superbacterias con el fin de determinar el riesgo en el aire. Sus hallazgos serán utilizados para optimizar el diseño de futuros edificios del hospital, diseños de habitaciones y equipo médico para minimizar el riesgo e impedir la propagación de bacterias y superbacterias.
“Usar nuestra comprensión de la dinámica de flujo de aire, ahora podemos utilizar estos modelos para investigar cómo los diferentes diseños y diferentes posiciones de las ventanas, puertas y conductos de ventilación podrían ayudar a prevenir que los microorganismos que se depositen en superficies accesibles” añadió Marco-Felipe Rey, un estudiante que ayudó a diseñar la sala de ensayo para el estudio.
COMMENTS