Los cálculos renales son una de las condiciones más dolorosas que una persona puede desarrollar. Sin embargo, un reciente estudio publi...
Los cálculos renales son una de las condiciones más dolorosas que una persona puede desarrollar. Sin embargo, un reciente estudio publicado en la Revista de Urología ha encontrado que el mantener un alto consumo de calcio y líquidos, el reducir la sal en la dieta, puede ayudar a prevenir la formación de cálculos renales. El diente de león, la sabila, el vinagre de sidra de manzana, los arándanos, el magnesio y el potasio pueden ayudar a prevenir, o incluso desechar, los cálculos renales.
Dr. Mathew Sorensen, un urólogo de la Escuela de Medicina (UWSC) en Seattle de la Universidad de Washington, y sus colegas evaluaron los datos de más de 78,000 mujeres estadounidenses que fueron seguidas durante ocho años. Durante este tiempo, una de cada 40, o el 2.5%, de estas mujeres desarrollaron cálculos renales por primera vez.
Lo que los investigadores descubrieron, sin embargo, fue que el consumo alto de calcio y los fluidos se relacionó con un menor riesgo de desarrollar cálculos renales, mientras que aquellos con el menor consumo tenían el mayor riesgo. El 20% de las mujeres que consumieron la mayor cantidad de calcio, por ejemplo, tenían un 28% menos probabilidades de desarrollar cálculos renales en comparación con el 20% de las mujeres que consumieron la menor cantidad de calcio.
Los resultados fueron similares entre las mujeres que bebían la mayor cantidad de líquidos, que eran 20% menos probables de desarrollar cálculos renales en comparación con aquellas que bebían los menos líquidos. El consumo de sal, sin embargo, parecía tener el mayor efecto, ya que el 20% de las mujeres que consumieron la mayor cantidad de sal fueron 61% más de probables de desarrollar cálculos renales que el 20% que comían la menor cantidad de sal.
El hallazgo de calcio es particularmente interesante, ya que se cree que el consumo de calcio contribuye a la formación de cálculos renales. Pero parece como si comer alimentos naturalmente ricos en calcio – semillas de sésamo, sardinas, col rizada, espinacas, algas, garbanzos, y el brócoli son algunos buenos ejemplos – pueden ayudar a prevenir la formación de cálculos renales.
El diente de león, una poderosa hierba medicinal que es un diurético conocido, también ayuda a aumentar la cantidad de orina que el cuerpo produce, que se cree que ayuda a diluir los componentes que contribuyen a la formación de cálculos renales, y expulsarlas del cuerpo. La sabila, el vinagre de sidra de manzana, los arándanos, el magnesio y el potasio pueden ayudar a prevenir los cálculos renales.
“Las proteínas y los oxalatos en el cuerpo tienen más que ver con cálculos renales que el calcio”, escribió el equipo de George Kessler y el Leen Kapklein en su libro ‘El Programa de densidad ósea: 6 Semanas para huesos fuertes y un cuerpo sano’. “El más calcio natural que se obtiene de los alimentos en su dieta, menor es la probabilidad de desarrollar cálculos renales.”
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