Con la profesora asociada María Kozhevnikov del Departamento de Psicología de la Universidad Nacional de Singapur Facultad de Artes y Cienci...
Con la profesora asociada María Kozhevnikov del Departamento de Psicología de la Universidad Nacional de Singapur Facultad de Artes y Ciencias Sociales, dirigió un equipo de investigadores, y encontraron que la temperatura corporal es algo que está bajo el control personal.
La investigación llevo a los científicos a la conclusión de que un aumento en la temperatura corporal se puede lograr por medio de técnicas de meditación, técnicas específicas que también pueden ayudar a las personas con inmunodeficiencia.
“Publicado en la revista científica PLOS ONE en marzo del 2013, el estudio ha documentado el aumento de temperatura corporal aumenta por primera vez en la práctica de monjas tibetanas utilizando la meditación g-tummo.”
“Los investigadores recogieron datos durante la ceremonia única en el Tíbet, donde las monjas fueron capaces de elevar su temperatura corporal y se secar sabanas mojadas envueltas alrededor de sus cuerpos en el frío clima del Himalaya (-25 grados Celsius) durante la meditación.”
Además de las monjas durante el estudio de Tíbet, un conjunto de participantes occidentales consiguió resultados del calentamiento corporal con técnicas de respiración, en un segundo estudio.
¿Qué es G-tummo?
Hay dos aspectos principales para la técnica de g-tummo que ayudó a elevar la temperatura corporal de los participantes. El aspecto principal es la técnica de respiración llamada “respiración contenida”. El segundo aspecto es una visualización de concentración donde el practicante crea una imagen mental de llamas a lo largo de la columna vertebral.
En conjunto, ambas de estas técnicas han aumentado la temperaturas corporal a la zona de fiebre moderada en muchos que han practicado. ¿Dónde está el valor en el aumento de las temperaturas corporal?
Además de la capacidad de adaptarse y funcionar en ambientes más fríos, las técnicas de g-tummo meditación pueden ser capaces de aumentar el rendimiento cognitivo, acelerando los reflejos, así como mejorar la resistencia a las infecciones.
La profesora Kozhevnikov explicó: “La práctica de la respiración contenida por sí sola es una técnica segura para regular la temperatura corporal en un rango normal. Los participantes a quienes enseñé esta técnica fueron capaces de elevar la temperatura de su cuerpo, dentro de ciertos límites, y reportaron sentirse con más energía y más centrados. Con más investigación, los practicantes de meditación no-tibetanos podrían utilizar la respiración contenida para mejorar su salud y regular el rendimiento cognitivo.”
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