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Dos estudios recientes que observan la estructura del cuerpo humano y cĆ³mo se ha debilitado considerablemente en los Ćŗltimos aƱos proporcionan algunas ideas fascinantes en el gran impacto que la actividad fĆsica tiene sobre la salud humana. El hombre antiguo, resulta que era mĆ”s fuerte, mĆ”s grande, mĆ”s rĆ”pido y probablemente, mucho mĆ”s saludable que el hombre de hoy, el resultado directo de la mecanizaciĆ³n de la sociedad moderna y de los trabajos de producciĆ³n, incluida la agricultura industrializada.
Investigadores del Reino Unido, despuĆ©s de estudiar los restos de lo que se cree ser antepasados humanos que vivieron miles de aƱos en el pasado, se dieron cuenta que las estructuras Ć³seas humanas se han vuelto cada vez mĆ”s pequeƱas a lo largo de los siglos. Los cazadores y recolectores de la antigĆ¼edad esencialmente tenĆan huesos mĆ”s gruesos y mĆ”s fuertes, sobre todo en las piernas, si los viĆ©ramos hoy dĆa podrĆan incluso hacer que los atletas olĆmpicos mĆ”s fuertes parecer pequeƱos y delicados.
“Incluso nuestros atletas mejor entrenados no se comparan con estos antepasados nuestros” declarĆ³ el doctor Colin Shaw del grupo de investigaciĆ³n fenotĆpico, adaptabilidad, VariaciĆ³n y EvoluciĆ³n la Universidad de Cambridge “Somos sin duda mĆ”s dĆ©biles de lo que solĆamos ser.”
El dr. Shaw publicĆ³ un estudio a principios de este aƱo en el Journal of Human Evolution, que se centrĆ³ en la movilidad de los hombres y mujeres del Pleistoceno tardĆo, que vivieron hace al menos 12,000 aƱos. Huesos fosilizados que se cree que provienen de este perĆodo se obtuvieron de diversas partes del mundo y se analizaron en tĆ©rminos de rigidez y tamaƱo.
En comparaciĆ³n con las estructuras Ć³seas de los hombres y las mujeres de hoy en dĆa, estos antiguos restos Ć³seos son a la vez mĆ”s grandes y mĆ”s fuertes, probablemente debido a las tĆ©cnicas de caza y recolecciĆ³n que se requerĆan para poder comer. Mucho antes de los dĆas de la agricultura estructurada, los humanos tuvieron que correr largas distancias todos los dĆas para recolectar alimentos, por no hablar de tener la capacidad de utilizar herramientas pesadas para atraparlo.
“Hacemos mucho, mucho menos que nuestros antepasados y nuestros esqueletos reflexiona esta disminuciĆ³n de actividad” dijo Robb Wolf, autor de La soluciĆ³n de Paleo, citado por OutsideOnline.com
TƩcnicas modernas de agricultura han hecho la gente mƔs perezosa y dƩbil
El estudio del Dr. Shaw coincide con otro publicado recientemente por uno de sus colegas, Alison Macintosh. Su papel, titulado “De adictos a la televisiĆ³n a los atletas: los seres humanos a travĆ©s de 6,000 aƱos de agricultura” aborda el advenimiento de la agricultura industrializada, que segĆŗn ella lo cambiĆ³ todo. Cuando las sociedades de cazadores-recolectores pasaron a tener una agricultura estructurada, la estructura humana tuvo un gran Ć©xito.
Tras el anĆ”lisis de los restos Ć³seos que se reunieron a partir de un perĆodo de tiempo mĆ”s reciente entre 5,300 aC y 850 dC, Macintosh y sus colegas compararon la densidad y el tamaƱo de los huesos de los estudiantes que asisten a la Universidad de Cambridge en la actualidad. No sĆ³lo el esqueleto promedio se ha reducido en tamaƱo desde entonces, pero tambiĆ©n se ha vuelto mĆ”s dĆ©bil y menos rĆgido.
“El ciudadano promedio de Estados Unidos esta en considerablemente peor estado fĆsico que los cazadores o recolectores promedio” declarĆ³ el Dr. Loren Cordain , profesor emĆ©rito de salud y ciencias de ejercicio en la Universidad Estatal de Colorado y autor del libro La dieta de Paleo. Basado en estos dos estudios, el agricultor promedio hace 7,300 aƱos estaba tan en forma como un corredor profesional hoy en dĆa.
“La lecciĆ³n que hay que aprender no es de los primeros agricultores y sus patrones de dieta y ejercicio, pero de nuestros antepasados cazadores y recolectores y sus patrones de dieta y ejercicio. Estos ejemplos representan las normas para nuestra especie y las experiencias ambientales que condicionan nuestro genoma” aƱadiĆ³.
TambiĆ©n se cree que los cazadores y recolectores de la antigĆ¼edad que consumieron una dieta muy diferente a la persona promedio de hoy. En lugar de grandes cantidades de carbohidratos y azĆŗcar, la dieta del PaleolĆtico, que hoy se ha convertido en una moda, se compone principalmente de grasas saludables, proteĆnas como la carne y carbohidratos procedentes de fuentes de origen vegetal en lugar de granos.
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